Cada niño coge un quesito babybel, lo abrimos y le quitamos solo una mitad del envoltorio dejando la otra, que hará de gorro de Papa Noel.A continuación untamos el quesito en philadelphia a modo de barba, y lo clavamos en un palillo.
Con la otra mitad del envoltorio le colocamos la nariz, con más philadelphia le añadimos el pompón del gorro y con un rotulador de tinta comestible le pintamos los ojitos.
Estamos deseando que lleguen las vacaciones para poder probarlos, ¡qué buena pinta!
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